Vecinos y la CHS denuncian vertidos a una rambla de Mazarrón
«No podemos vivir con esta ciénaga al lado de casa; es un foco de mosquitos y olores», critica una afectada de La Atalaya
Unos vertidos de aguas residuales han convertido un tramo de la rambla de Baltasar, o del Cambrón como también se la conoce, en la pedanía mazarronera de La Atalaya, en «una ciénaga; no podemos vivir con este foco de mosquitos y malos olores al lado de casa», lamenta una afectada. Vecinos de la zona y la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) denuncian los desechos urbanos que van a parar a dicho cauce público y que tendrían su origen en una urbanización de la zona, levantada en 2005. Dicho residencial carecería de unas infraestructuras adecuadas para el correcto tratamiento de los residuos que generan sus moradores.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ya se desplazó a la pedanía con el fin de realizar una inspección e iniciar una investigación. Los agentes dejaron constancia en un informe de la existencia de residuos «provenientes en principio de una estación de decantación que vierte directamente a unos diez metros de la rambla». Desde el organismo de cuenca indican que «al tratarse de vertidos urbanos, la competencia es municipal y la solución debe darla el Ayuntamiento». La CHS ya se lo comunicó al Consistorio.
En el equipo de gobierno municipal conocen la situación. Desde la Concejalía de Sanidad recuerdan que ya hay un expediente abierto y se ha solicitado otro informe técnico. Según los afectados, el problema se ha agravado con el paso del tiempo, a la par que han llegado inquilinos al complejo residencial. Algunos lo utilizan como lugar de vacaciones. La Atalaya, una diputación rural, carece de red de saneamiento y las casas de campo de la zona han funcionado con fosas sépticas.
Vecinos y la CHS denuncian vertidos a una rambla de Mazarrón