Drogas, hachas, un bastón estoque y 2.000 euros decomisados a un grupo delictivo de Mazarrón

Regentaban tres de los puntos de venta de estupefacientes que más actividad registraban en el municipio costero

Drogas, hachas, un bastón estoque y 2.000 euros han sido decomisados, en el marco de la operación ‘Yusanfer’ a un grupo delictivo de Mazarrón, informa la Guardia Civil en un comunicado. El Cuerpo ha arrestado a cuatro individuos que, tras pasar por el Juzgado de Guardia de Totana, ya están libres con cargos.

Las pesquisas comenzaron en octubre. Según detalla el Instituto Armado, se practicaron tres registros domiciliarios, donde se hallaron más de 150 dosis de cocaína, 300 gramos de marihuana en cogollos, 85 gramos de hachís y otros efectos relacionados con el tráfico de drogas, como básculas de precisión. También se incautaron más de 2.000 euros en efectivo, teléfonos móviles y diversas armas, entre las que destaca el citado bastón estoque, que se considera un arma prohibida, y dos armas de fuego simuladas, desgrana el Cuerpo. 

Los cuatro sospechosos están «relacionados con tres de los puntos de venta de drogas que más actividad registraban en el municipio de Mazarrón».

En otoño de 2022, la Benemérita «detectó un incremento en la afluencia de personas a las que se denunciaba por la tenencia de sustancias estupefacientes en la vía pública, los que motivó el inicio de la investigación para estrechar el cerco de búsqueda en un barrio, donde se tenía sospechas de que podían estar situados varios puntos de venta de drogas al menudeo«.

«Las indagaciones practicadas permitieron identificar a tres individuos, con un amplio historial delictivo entre otros por tráfico de drogas, que se dedicaban de forma muy activa a la venta de sustancias estupefacientes en las inmediaciones de sus propios domicilios, donde recibían a sus compradores en la puerta de sus viviendas y, sin importarles la presencia de menores, realizaban las transacciones de distintos tipos de drogas», prosigue el Cuerpo, que añade que «en ocasiones eran los propios compradores quienes llegaban a entrar en el interior de los domicilios de los tres investigados y consumir las sustancias in situ y así evitar ser detectados en posteriores controles policiales».

Animales en pésimas condiciones

«También se dedicaban a transportar la droga a diversos puntos donde quedaban para hacer los intercambios y así alejar el foco de atención de sus viviendas», prosigue la nota.

Cuando se llevó a cabo la entrada y registro de los lugares bajo sospechas, la Guardia Civil se encontró dentro «un gran volumen de animales que se encontraban en pésimas condiciones«, por lo que «los investigadores solicitaron el apoyo de los efectivos del Seprona de la Guardia Civil, que constataron la existencia de diversas infracciones administrativas en materia de medioambiente en los tres domicilios en los que se intervino», detalla el Instituto Armado.

«Dentro del dispositivo desplegado en la fase de explotación de la operación, los guardias civiles detectaron conexiones ilícitas a la red eléctrica en algunas viviendas, por lo que se contactó con la empresa administradora de electricidad, que realizó cortes de luz de ocho domicilios que se encontraban defraudando electricidad pública».